Hace bastante que nadie escribe aquí y como, entre una cosa y otra, ya hará un par de semanitas que no tenemos noticias los unos de los otros, he decidido escribir y contaros, aunque sea, que voy a hacer en mis últimos días de vacaciones.
Poco más o menos, se puede resumir en una palabra: andar.
Y es que mañana empieza nuestra aventura del camino de Santiago y como tenemos intención de llegar, nos esperan casi dos semanas de patear, conocer pueblos gallegos (alguno leonés también) y comer atún y lechuga sin aliñar.
Deseadnos suerte y a la vuelta hablamos, ¿vale?
Un muxutxu!
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